Las cremas antiinflamatorias son algunos de los tratamientos más eficientes para combatir las contracturas en los músculos en cualquier parte del cuerpo. Este tipo de medicamentos suelen ser muy bien recibidos por los pacientes, pues su tiene gran cantidad de beneficios:
- El efecto es localizado, por lo que no tiene impacto en el resto del cuerpo; como lo tienen por ejemplo, los relajantes musculares orales, endovenoso o intramuscular. Esto implica una menor cantidad de posibles efectos secundarios.
- Los resultados se sienten en el área afectada con bastante rapidez; así que el paciente puede sentir alivio al dolor con rapidez.
- La aplicación es bastante simple y no requiere de manos especializadas.
- Hay una gran variedad de tipos de cremas antiinflamatorias, por lo que el paciente podrá escoger la de su preferencia teniendo en cuenta su situación particular.
Contenido de las Cremas Antiinflamatorias
Los ingredientes de las cremas antiinflamatorias son diversos y muy variados. Prácticamente cada laboratorio de la industria farmacéutica elige que tipo de contenido incluye en su producto, de tal manera de realizar una propuesta que cumpla con la expectativas de los consumidores. Sin embargo, hay algunos ingredientes que suelen repetirse en la mayoría de las cremas con propiedades antiinflamatorias.
Diclofenaco
El diclofenaco es un antiinflamatorio no esteroideos. Esta sustancia inhibe la producción de ciclooxigenasa, que es la sustancia responsable de los procesos inflamatorios. Es importante destacar que la ciclooxigenasa es responsable también de funciones fisiológicas esenciales como: mantenimiento del flujo renal, segregación de plaquetas y mucho más.
Para poder superar la inflamación, es fundamental impedir que la ciclooxigenasa prolifere; sin embargo, al ingresar en el organismo diclofenaco, no sólo actúa sobre la inflamación en el músculo sino que puede actuar sobre funciones esenciales del cuerpo. La aplicación localizada del diclofenaco es prefereible; de esta manera, se impide que existan efectos indeseables en el organismo.
Ibuprofeno
El ibuprofeno es una sustancia clasificada como antiinflamatorio no esteroideo y analgésico. Este fármaco puede beneficiar en gran medida al tratamiento de contracturas musculares, al actuar como un inhibidor de ciclooxigenasa. Si bien es cierto que la ciclooxigenasa es una sustancia que se concentra en los músculos y favorece la inflamación que produce la contractura, también es responsable de funciones esenciales del organismo.
El abuso de la ingesta de ibuprofeno puede producir los siguientes efectos adversos: aumenta el riesgo de paro cardíaco, complicación en úlceras estomacales, dificultades en las funciones renales y complicación de infecciones graves. Todos los efectos secundarios se pueden evitar al hacer uso del ibuprofeno para las contracturas de manera local, como en crema.
Salcilato de Metileno
Es una sustancia con propiedades antiinflamatorias, analgésicas y antipiréticas, que es muy efectiva para tratar las contracturas en los músculos de cualquier parte del cuerpo. Una de las características más resaltantes de esta sustancia es que favorece el flujo sanguíneo del área en el que se utiliza, por lo que suele ser un ingrediente muy común en las cremas para tratar las contracturas en los músculos.
Gracias a que favorece a la irrigación sanguínea de la zona, las células dañadas por la contractura se regenran debido a la oxigenación que se obtiene. El efecto de esta sustancia se produce a gran velocidad, así que se obtendrán alivio del dolor de la contractura en poco tiempo.
Piketoprofeno
El piketoprofeno es un antiinflamatorio no esteroideo y analgésico, que favorece el tratamiento para combatir las contracturas en cualquier parte del cuerpo; pero también otro tipo de afecciones como: contusiones, hematomas, distensiones, lumbalgias, cervicalgias, esguinces y más.
Esta sustancia impide la proliferación en las áreas lesionadas de prostaglandinas, que favorecen la inflamación; aunque también cumple funciones biológicas como: cicatrización, disminuyen la producción de colesterol, regulan la temperatura corporal, controlan la presión arterial y mucho más. Por todo esto, su uso por vía oral de manera excesiva no es recomendable. El uso de este antiinflamatorio se da de manera más común de forma localizada, como en cremas.
Etofenamato
El etofenemato contiene propiedades analgésicas y antiinflamatorias, debido a que impide la producción de prostaglandinas; que son responsables de la inflamación en los músculos de todas las partes del organismo. Las prostaglandinas cumplen también funciones esenciales en el cuerpo, por lo que la manera ideal de aplicar etofenamato es de manera localizada.
Esta sustancia se recomienda para tratar las contracturas, los hematomas, las contusiones, los esguinces y mucho más. El etofenamato actúa ante cualquier tipo de lesión del sistema músculo esquelético y tiene un efecto de gran beneficio.
Menta
La menta es un producto natural que tiene propiedades analgésicas potentes y comprobadas; las características de su temperatura favorecen la disminución del dolor, pues al principio se tiene una sensación de frío y luego de calor. Además, también contiene propiedades antiinflamatorias ideales para actuar sobre el sistema músculo esquelético.
La menta es una planta con conocidos usos medicinales y que las cremas antiinflamatorias usan con bastante frecuencia; no sólo por sus características curativas sino también por su agradable olor. Es su olor también que ayuda a que el paciente pueda relajarse; una propiedad muy útil cuando se trata de una contractura en la zona cervical.
Alcanfor
El alcanfor es un producto natural que se encuentra en la madera de un árbol llamado alcanforero. Las propiedades medicinales del alcanfor son bastante amplias, entre ellas cabe destacar su impacto beneficioso en el sistema músculo esquelético. Es un producto orgánico ampliamente utilizado para tratar problemas en las articulaciones, incluso reumatismo.
Actualmente, este producto se puede obtener de manera artificial y es utilizado en la industria farmacéutica en cremas para aliviar todo tipo de molestias musculares; también se usa como un potente expectorante.
Árnica
El árnica es uno de los productos naturales que se está incluyendo en las cremas antiinflamatorias por su amplio espectro de acción. De hecho, es una planta que utilizada de manera casera puede ayudar mucho a superar una contractura, así que los laboratorios han comenzado a hacer uso de ella para beneficiar a mayor cantidad de personas.
El árnica se considera como el producto más potente en contra de las contracturas en los músculos.
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